Julián Álvarez
Es el protagonista de la novela. Julián es un joven capellán de modales refinados. Es sensible, casi afeminado, y muy rígido consigo mismo. Vive la religión con austeridad y sacrificio.
Marcelina ("Nucha")
Nucha es una muchacha sensible, servicial, sumisa y de salud endeble. Tiene sentimientos profundamente religiosos. Responde al prototipo de buena esposa de la época. Es una de las cuatro hijas de don Manuel de la Lage y, por tanto, es prima de don Pedro, quien se casa con ella por ser moralmente virtuosa, aunque no la considera para nada agraciada ni atractiva.
Don Pedro Moscoso de la Lage
Se trata del Marqués de los Pazos de Ulloa. Es arrogante, autoritario y machista. Está orgulloso de ser heredero de una estirpe familiar noble, cuya decadencia parece no percibir. Don Pedro es un hombre carente de voluntad. Ha dejado su hacienda en manos de su capataz, Primitivo, aun a sabiendas de que este le roba y lo manipula.
Primitivo
Es un hombre astuto e interesado. Es el capataz en los Pazos y quien, desde las sombras, maneja los hilos de cuanto ocurre en la casa. Es sumamente violento y peligroso. Es el padre de Sabel y el abuelo de Perucho.
Sabel
Es la hija de Primitivo, y criada y cocinera en la casa. Mantiene una relación secreta, pero a la vez públicamente conocida, con don Pedro, fruto de la cual nació Perucho. Es una mujer muy atractiva que vive su sexualidad de manera impúdica, seduciendo y teniendo relaciones con diferentes hombres de la zona.
Perucho
Es el hijo ilegítimo de Sabel y don Pedro. Crece sin supervisión alguna y, por ello, está acostumbrado a buscarse la vida por cualquier medio. Conoce el campo como la palma de su mano. Al margen de su falta de educación, varias veces demuestra ser bondadoso y tener un buen sentido de la moral.
Máximo Juncal
Es un médico eminente de la zona y hombre de ideas progresistas: antimonárquico, anticlerical y defensor de los derechos de la clase trabajadora. Tiene serios problemas con la bebida.
Trampeta
Es uno de los dos grandes caciques de la zona. Secretario del ayuntamiento de Cebre, es un hombre atrevido, impulsivo y violento, de ideas liberales. En las elecciones recurre a todo tipo de artimañas fraudulentas para resultar vencedor.
Barbacana
Es el otro gran cacique de la zona. Abogado del ayuntamiento de Cebre, es un hombre autoritario, astuto y vengativo, de ideas conservadoras. En las elecciones apoya la candidatura de don Pedro.
Don Ramón Limioso
Se trata del último descendiente de una casa noble en decadencia. Su situación económica es ruinosa, pero mantiene intactos sus ideales de casta y sus aires de grandeza.
Rita
La mayor de las primas de don Pedro es hermosa y seductora. Don Pedro se siente fuertemente atraído por ella, pero no le pide casamiento porque no la considera moralmente virtuosa.
Manolita y Carmen
Son las otras dos de las cuatro primas de don Pedro. Manolita es la segunda, de mayor a menor, y Carmen es la más joven. A Manolita la pretende un estudiante de Derecho de alta alcurnia, y a Carmen, un estudiante de Medicina de una familia humilde.
Don Manuel de la Lage
Es el tío de don Pedro. Hombre de ideas conservadoras, goza de cierta posición social en Santiago.
Don Eugenio
El párroco de Naya es un hombre de carácter afable, comprensivo y conciliador, con el que Julián congenia. Don Eugenio trata de que este sea indulgente con las faltas ajenas y menos riguroso consigo mismo.
El arcipreste de Loiro
Representante típico de la iglesia, es un hombre autoritario y conservador que, en las elecciones, apoya a la facción de Barbacana.
El Tuerto de Castrodorna
Matón de Barbacana, es un hombre conocido por su temeridad y su violencia. Asesina a Primitivo.
La hija de Nucha y don Pedro
En Los Pazos de Ulloa, la pequeña beba no tiene nombre. Sin embargo, ella será una de los personajes principales de la continuación de esta novela, La madre naturaleza. Allí descubrimos que Nucha llamó a su hija como una de sus hermanas: Manolita.
La nodriza
El aya o nodriza tampoco tiene nombre. Se la compara en dos ocasiones con una vaca, por el tamaño de sus senos y su contextura física. Es una mujer fuerte y sumamente rústica.
Sabia
Anciana que suele pasar el tiempo junto a Sabel en la cocina de los Pazos. Domina el oscuro arte del tarotismo.
El abad de Ulloa
El abad de Ulloa es un párroco conservador, afín a la bebida y la caza. Ocupaba el cargo de Julián antes de su llegada.
