Publicada en 1862, Los miserables se considera un clásico de la literatura mundial. Una epopeya extensa que se centra en los marginados sociales de la Francia de principios del siglo XIX, es tanto un homenaje a la cultura francesa como una recopilación de observaciones respecto de la naturaleza humana.
Con una extensión de más de 1200 páginas, Víctor Hugo tardó 17 años en completar Los miserables. La novela está profundamente atravesada por las ideas revolucionarias y democráticas y por los puntos de vista espirituales del autor. Víctor Hugo pretendía que la novela tuviera un atractivo universal y así se lo comunicó a su editor italiano: "No sé si será leído por todos, pero está destinado a todos. [...] Dondequiera que los hombres vayan en la ignorancia o la desesperación, dondequiera que las mujeres se vendan por pan, donde los niños no tengan un libro del que aprender o un hogar cálido, Los miserables llama a la puerta y dice: "Ábreme, estoy aquí para ti".
Los miserables fue una novela muy esperada; cuando los primeros capítulos del libro (que ahora componen la sección "Fantina") se publicaron como una serie, se agotaron casi de inmediato. Un intercambio humorístico (y quizás apócrifo) entre Víctor Hugo y su editor, quizás captura mejor el éxito explosivo del libro. Hugo estaba de vacaciones durante la publicación de la novela y envió un telegrama muy breve a su editor preguntándole sobre el éxito comercial del manuscrito. El mensaje de Víctor Hugo constaba únicamente del símbolo "?". A lo que su editor respondió "!", dándole a entender que había sido un éxito. Esta historia apareció originalmente en un manuscrito de 1892 titulado "Libro práctico de curiosidades literarias" y puede que no sea históricamente exacto, pero es un testimonio de la popularidad instantánea de la novela en Francia.
Si bien el libro fue inmensamente popular en el momento de su publicación, los críticos tuvieron apreciaciones negativas sobre él. Charles Baudelaire, un destacado poeta contemporáneo, lo catalogó como un texto torpe y de mal gusto. Otros criticaron la novela por sus largas diatribas políticas, su sentimentalismo y sus hechos poco realistas. Nada de esto impidió que Los miserables se convirtiera en un gran éxito de ventas y se tradujera a docenas de idiomas.
Los miserables se ha adaptado al cine, a la televisión, al teatro e, incluso, al manga. En 2012 el texto se utilizó para realizar el musical protagonizado por Hugh Jackman, Anne Hathaway y Russell Crowe, el cual fue nominado a ocho premios Oscar.