Hojas de hierba Elementos Literarios

Walt Whitman se constituye como el Yo poético de toda su obra y se presenta a sí mismo como el héroe de su epopeya por los Estados Unidos.

La poesía de Whitman no sigue una estructura marcada y no presenta tampoco una métrica fija. Sus poemas utilizan el verso libre como estructura principal y las exclamaciones y las repeticiones como elementos estructurantes.

Whitman utiliza muchas metáforas y símiles en cada uno de sus poemas. A continuación, consignamos algunos de ellos:

"Me alejo como el viento sacudiendo mi blanco pelo hacia el Sol fugitivo, / lanzo mi cuerpo al centro del veloz remolino y lo disperso en jirones de espuma" (p. 113). En este pasaje, las metáforas se concatenan y proponen una visión del poeta fundiéndose con su entorno hasta abarcar todo el universo.

"La gran voz del tenor, potente y fresca cual la creación, me llena, / la órbita flexible de su boca derrama en mí melodías que me colman por completo" (p. 74). Aquí, Whitman utiliza un símil y compara el tono de voz del cantante con la creación del universo.

"Hojas de hierba" se caracteriza por su originalidad en cuanto a su estructura poética: Whitman escribe en verso libre y no recurre a las figuras retóricas más populares de la poesía en lengua inglesa. En la traducción al español, sus poemas no presentan aliteración ni asonancia.

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Poesía - verso libre.

El escenario para la poesía de Whitman es todo Estados Unidos y, especialmente, Nueva York y Paumanok (Long Island). Más específicamente, muchos poemas tienen como escenario la naturaleza, mientras que otros describen ciudades y la vida urbana del país naciente.

El tono de Whitman varía entre la celebración, la profecía y la interpelación al lector, todo ello con la cadencia inconfundible de sus versos sin estructura ni rima.

El protagonista del poema es Walt Whitman, en comunión con el lector y con toda la humanidad. No existe un antagonista en sus poemas.

Whitman presenta su viaje por los Estados Unidos y sus reflexiones en torno a la vida y la muerte, el cuerpo y el alma, y la existencia individual y colectiva.

Aunque no existe un momento puntual que pueda considerarse el clímax de su poesía, sí podría considerarse que "Canto a mí mismo" es el poema en el que el autor alcanza el clímax de su obra.

Whitman escribe "Dedicatorias", una serie de poemas ubicados al inicio del libro que adelantan cuál es su proyecto poético y qué temas va a desarrollar en las secciones siguientes.

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La poesía de Whitman está llena de alusiones al contexto social y político de los Estados Unidos de la segunda mitad del siglo XIX. En extensos catálogos, Whitman alude a muchos estados y ciudades del país naciente, y en otros poemas hace referencia a sus habitantes. Además, en "Conmemoraciones", Whitman alude directamente a la muerte de Abraham Lincoln.
En este fragmento, Whitman alude a la procesión fúnebre que acompaña al cadáver del presidente:
"Ataúd que pasa a través de los senderos y las calles, / a través del día y la noche con la gran nube que ensombrece al país, / con la pompa de las banderas a media asta, con las ciudades enlutadas, / con el espectáculo de los Estados, ellos mismos cual mujeres de pie cubiertas de crespones, / con la procesión larga y serpenteante y las antorchas en la noche, / con las innumerables antorchas encendidas, con el mar silencioso de los rostros y las cabezas descubiertas..." (p. 207).

Whitman utiliza estas figuras retóricas muy a menudo en sus poemas, especialmente para dirigirse a un interlocutor de forma general y lograr plasmar una visión totalizante sobre su proyecto poético. Así, utiliza en numerosas ocasiones los términos "Hombre" (p.13), "Mujer" (p. 13), "hembras y machos" (p. 26), y "camarada mío" (p. 30), para dirigirse a toda la humanidad en general, a la que pretende englobar. En otros poemas, habla de "reyes" (p. 200) para referirse de forma global a los gobernantes de la vieja Europa. Para referirse a sus poemas, Whitman también utiliza la metonimia y los llama cantos y hojas.

Walt Whitman recurre a abundantes personificaciones en sus poemas; en "Canto a mí mismo", el alma como concepto total atraviesa toda la creación y la hace participar de un orden universal en el que la naturaleza puede cargarse de atributos propios de los humanos y viceversa. En el siguiente pasaje, la noche y la tierra aparecen personificadas:
"¡Noche somnolienta y complaciente, loca y desnuda noche de verano!
¡Sonríe, tierra voluptuosa de fresco aliento!" (p. 66).

Puede considerarse que los cantos celebratorios de Whitman son una gran hiperbolización del individuo y de los sentimientos de amor y de camaradería entre los hombres.

En la traducción al español este recurso no es utilizado.