Las batallas en el desierto Elementos Literarios

Novela corta.

México, fines de la década de 1940.

Se trata de un relato en primera persona que reconstruye los recuerdos de la niñez del narrador, alternando el punto de vista del narrador adulto, Carlos, con el punto de vista de Carlitos, el niño que fue durante los años recordados. Las voces de otros personajes se incorporan a la voz del narrador mediante el discurso indirecto libre.

El tono de la novela es liviano y el lenguaje, sencillo. Abunda en términos coloquiales que representan la forma de hablar típica de los personajes.

El protagonista es Carlos, y como antagonistas podrían considerarse las narrativas que los adultos utilizan para pensar el mundo y contra las que Carlos se rebela.

Carlitos se enamora de Mariana, la madre de uno de sus amigos del colegio. Ante la obsesión que lo tortura, decide confesar su amor a la mujer, y cuando sus padres se enteran arman un enorme drama al respecto: lo cambian de colegio, lo regañan y lo envían a confesarse con el cura y a tratarse con un psiquiatra.

El clímax de la novela se alcanza al final del capítulo 8, cuando los padres de Carlitos se enteran de que su hijo le ha confesado su amor a una mujer adulta, madre de uno de sus amigos. A partir de ese momento, el conflicto deriva hacia el tratamiento y la "cura" que los adultos buscan para el problema de Carlitos.

Si bien el presagio no está utilizado como una estrategia narrativa en la novela, existe un motivo que se repite y que en el capítulo 1 anuncia de alguna manera la obsesión que desarrollará Carlitos por Mariana: se trata de los versos de un bolero puertorriqueño: "Por alto esté el cielo en el mundo, / por hondo que sea el mar profundo, / no habrá una barrera en el mundo / que mi amor profundo no rompa por ti" (pp.13-14).

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'Las batallas en el desierto' presenta una estética propia del arte pop que se caracteriza por las abundantes alusiones a la cultura popular. Así, Carlos recuerda los últimos años de la década de 1940 en México y hace mención de una gran variedad de productos de la cultura, desde series televisivas hasta marcas de autos y productos para el hogar. Así, las alusiones se convierten en el principal motivo de la novela. Desde el inicio, el lector puede encontrar referencias de este tipo: "Ya había supermercados pero no televisión, radio tan solo: Las aventuras de Carlos Lacroix, Tarzán, El Llanero Solitario, La Legión de los Madrugadores, Los Niños Catedráticos, Leyendas de las calles de México, Panseco, El Doctor I.Q., La Doctora Corazón desde su Clínica de Almas" (p.13). Conforme avanza el relato, las alusiones continúan y abarcan todos los ámbitos de la vida de los personajes. Incluso al final de la novela, el narrador se refiere a los productos de la cultura que evidencian la invasión norteamericana del mercado mexicano: "Vi la muerte en los refrescos: Mission Orange, Spur, Ferroquina. En los cigarros: Belmont, Gratos, Elegantes, Casinos" (p.73).

Consultar la sección "Imágenes" de la guía.

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