-
1
El Comendador se presenta en la obra hablando con sus criados sobre los beneficios de la cortesía y los perjuicios de la descortesía. ¿Qué dicen él y Flores sobre estos atributos? ¿Qué nos dice este diálogo sobre la forma de ser del Comendador?
El Comendador dice: “Es llave la cortesía / para abrir la voluntad / y, para la enemistad, / la necia descortesía.” (vv 13-16). Es decir, el Comendador sostiene que la conducta cortés permite establecer buenas relaciones y conseguir el afecto de las personas, mientras que la descortesía tiene el efecto contrario. Además, califica de "necia" la descortesía, lo que implica que considera o aparenta considerar que es una necedad comportarse con tal actitud.
A propósito del tema, Flores sostiene: “Llaman la descortesía / «necedad» en los iguales, / porque es entre desiguales / linaje de tiranía.” (vv 25-28). Es decir, según su opinión, ser descortés con las personas del mismo rango social constituye una necedad, mientras que serlo con las personas de clase inferior es una actitud tiránica.
Por un lado, vemos que el Comendador no sabe escuchar las palabras de Flores, porque se comporta como un necio con los Reyes Católicos, que pertenecen a su mismo estrato social, la nobleza, con el enfrentamiento armado que lleva a cabo en Ciudad Real. Por otro lado, siguiendo con la definición de Flores, es un tirano con sus súbditos, ya que tiene malos tratos y abusa de su poder con los villanos de Fuenteovejuna. De manera que, en ambos casos, el Comendador muestra que su conducta es descortés.
Además, el Comendador se muestra como un hipócrita: a pesar de que sostiene que la cortesía es la llave para establecer buenas relaciones, muy pronto la obra muestra que su comportamiento es totalmente contrario a este. En la primera escena, en la aldea de Fuenteovejuna, se nos presenta un diálogo entre dos labradoras que comentan que el Comendador ha abusado sexualmente a muchas mujeres del pueblo.
-
2
Compara las opiniones de Laurencia, Pascuala y el Comendador en relación a las conquistas amorosas de los hombres y las consecuencias que trae para las mujeres ceder a sus pretensiones.
En el primer diálogo en el escenario de Fuenteovejuna, Laurencia recomienda no confiar en los hombres, "No fïarse de ninguno" (v. 273). Asimismo, explica que la única preocupación de los hombres es tener relaciones sexuales: “porque todo su cuidado / después de darnos disgusto, / es anochecer con gusto" (vv. 245-247) y, finalmente agrega, "y amanecer con enfado” (v. 248). Esto último puede entenderse como la forma en que los hombres tratan a las mujeres luego de tener relaciones sexuales, es decir, de mala manera.
En el mismo sentido, Pascuala compara a los amantes lujuriosos con gorriones:
En el invierno, que el frío
tiene los campos helados,
decienden de los tejados,
diciéndole «tío, tío»,
hasta llegar a comer
las migajas de la mesa;
mas luego que el frío cesa,
y el campo ven florecer,
no bajan diciendo «tío»,
del beneficio olvidados,
mas saltando en los tejado
dicen: «judío, judío».
(vv. 253-264)
Es decir, después de satisfacer su apetito insultan a quienes les han dado de comer. De la misma forma, muchos hombres buscan satisfacer sus apetitos sexuales, diciendo palabras halagüeñas a las mujeres, y luego de conseguirlo se olvidan de las personas que los satisficieron: "Pues tales los hombres son: / cuando nos han menester, / somos su vida, su ser, / su alma, su corazón; / pero pasadas las ascuas, / las tías somos judías" (vv 265-270).
El Comendador, por su parte, considera a la mujeres objetos sexuales, que se utilizan y luego se olvidan. Dice que a las mujeres con las que satisface sus deseos fácilmente las olvida: "A las fáciles mujeres / quiero bien y pago mal." (vv 1083-1084). En el mismo sentido, agrega: "Un hombre de amores loco / huélgase que a su accidente / se le rindan fácilmente; / mas después las tiene en poco, / y el camino de olvidar, / al hombre más obligado / es haber poco costado / lo que pudo desear" (vv. 1097-1104).
De esta manera, su opinión concuerda y confirma lo que sostienen Laurencia y Pascuala. Según la perspectiva de estos tres personajes de diferente género y condición social, los hombres seducen a las mujeres para satisfacer sus deseos sexuales y, una vez que lo consiguen, se olvidan de ellas.
-
3
Muestre de qué modos la vida en la aldea se presenta como sencilla y digna. ¿En qué sentido influye esta caracterización en el violento desenlace de la obra?
En la primera escena en Fuenteovejuna se presenta un diálogo que permite mostrar las costumbres sencillas de la aldeana Laurencia. Allí, el personaje hace un listado de las comidas que come a diario y de su rutina (vv 217-249), y dice que prefiere estas costumbres antes que dejarse seducir por el Comendador, lo cual constituiría una conducta deshonrosa. De esta manera, se presenta la honradez de ella, al tiempo que se desarrolla el tema de la alabanza de la aldea y el menosprecio de la nobleza representada por el Comendador.
El diálogo en el que Frondoso muestra la falsedad del uso del lenguaje (vv 292-320) también sirve para mostrar, por oposición, la honestidad del lenguaje de los aldeanos, puesto que Laurencia señala que aquel uso es propio de las personas de la ciudad: "Allá en la ciudad, Frondoso, llámase por cortesía de esa suerte" (vv 321-323). La hipocresía de la ciudad destaca, por contraste, la forma de ser, más natural y honesta, de las personas del pueblo.
Por último, Esteban presenta al Comendador los sencillos regalos que le ofrece el pueblo. Como vemos, los presentes se ofrecen con humildad: "un pequeño presente que esos carros / traen, señor, no sin vergüenza alguna, / de voluntades y árboles bizarros, más que de ricos dones" (vv 552-555). Al mismo tiempo, con este gesto se resalta el respeto de los aldeanos hacia su señor.
Estas actitudes sirven para definir el perfil sencillo y digno de los aldeanos. Esto contribuye a que, al final de la obra, el alzamiento armado contra el señor no pueda interpretarse como el resultado de una conducta arbitraria o bestial, puesto que los aldeanos demuestran tener comportamientos correctos.
-
4
Analizar la inversión de los valores que se da en la obra entre el honor del pueblo / deshonor del caballero.
En el siglo XVII se presuponía que el honor correspondía al linaje de la nobleza. La idea que el Comendador tiene del honor corresponde a este presupuesto. Así, para él este es un atributo de la clase noble exclusivamente, que es permanente y hereditario. Por eso, vemos que se burla de los villanos que se atribuyen a sí mismos esta cualidad:
Regidor:
Lo que decís es injusto;
no lo digáis, que no es justo
que nos quitéis el honor.
Comendador:
¿Vosotros honor tenéis?
(vv 986-989)
Para los aldeanos, el honor es una estima que las personas reciben de los demás, debido al cumplimiento de sus deberes y a las buenas acciones que realizan. Asimismo, esta estima puede perderse por motivos personales o ajenos. Por ejemplo, un mal comportamiento como el del Comendador hace que este pierda su honor a ojos de los villanos. Del mismo modo, a causa de sus nefastas acciones, los hombres y mujeres de la aldea también pueden perder su honor. Por eso, para recuperarlo, es necesario que se venguen de él.
Cuanto Mengo intenta defender a Jacinta, apela al honor de su padre y de su esposo para pedirle al Comendador que castigue a los soldados que intentan llevársela: "Señor, si piedad os mueve / de soceso tan injusto, castigad estos soldados, / que con vuestro nombre agora / roban una labradora / a esposo y padres honrados" (vv 1225-1230)
Otro ejemplo se presenta cuando Mengo le pregunta a Laurencia si ama, y ella responde: "Mi propio honor" (v 345). De manera que Laurencia se considera a sí misma una mujer honrada y aprecia esa cualidad.
Las conductas de los aldeanos durante toda la obra demuestran ser más honrosas que las del Comendador. Así, a medida que avanza la obra, vemos cómo el caballero pierde esta estima social, mientras los aldeanos demuestran tenerla. Debido a que el mal comportamiento del Comendador va en detrimento de la honra de los aldeanos, su muerte a manos del pueblo queda justificada.
-
5
En el Arte nuevo de hacer comedias en este tiempo Lope de Vega sentó las bases del teatro moderno. Muestra de qué manera los consejos que imparte en esta obra se ven realizados en Fuenteovejuna.
En El arte nuevo de hacer comedias en este tiempo el dramaturgo propone no seguir las unidades clásicas de tiempo y lugar. En Fuenteovejuna podemos ver que la acción se presenta en diversos escenarios: en la villa de Fuenteovejuna, en Ciudad Real, en el palacio de los Reyes Católicos y en Almagro. También la acción sucede en más de un día.
Por otro lado, Lope recomienda mezclar lo trágico y lo cómico en una misma pieza, de manera que sea "grave una parte, otra ridícula". En Fuenteovejuna, si bien no hay un tema trágico, los asuntos graves están mezclados con toques humorísticos. Por ejemplo, en el interrogatorio a los habitantes de Fuenteovejuna, que constituye un momento de violencia atroz y de alta tensión dramática, Mengo usa el lenguaje de forma humorística:
Juez:
¿Quién le mató?
Mengo:
Señor, Fuenteovejunica.
Juez:
¿Hay tan gran bellaquería?
Del dolor se están burlando.
(vv 251-254).
Además, Lope defiende la polimetría de los versos que componen una obra, es decir, la inclusión de versos con diferente extensión métrica, según la ocasión. En Fuenteovejuna incluye, efectivamente, el soneto (once sílabas), el romance (ocho sílabas), la octava (once sílabas), el terceto (once sílabas) y la redondilla (ocho sílabas).