Altavoz o Narrador, y Punto de Vista
La perspectiva de estos poemas está dividida entre un yo poético, un "nosotros" poético, y una voz en tercera persona. Las que predominan son la primera y la tercera. El "yo poético" es una primera persona que se expresa como observadora de lo que describe, y puede rastrearse tanto a través de los pronombres personales correspondientes, como en el uso de la conjugación verbal en primera persona singular. En los poemas "Milonga", "Paisaje bretón", "Croquis Sevillano" , "Río de Janeiro", "Sevillano", "Verona", "Chioggia, "Corso", "Fiesta en Dakar" y "Exvoto", en cambio, no aparece ninguna marca del yo poético, y el poema se construye en tercera persona.
La excepción a estas dos variables predominantes está en los poemas "Nocturno", "Lago Mayor", "Pedestre" y "Otro nocturno", que están construidos con un "nosotros" poético. Se observa en la conjugación verbal de primera persona del plural, y en los pronombres correspondientes.
Forma y Medidor
La forma que predomina en este poemario es la del poema en prosa, también llamada prosa poética. "Paisaje Bretón", "Corso", y parte de "Chioggia" constituyen una excepción, dado que están construidos mediante el verso libre (es decir, las frases se cortan en algún lugar de la línea, sin necesidad de completar una línea, sin una métrica definida, produciendo versos y estrofas de estilo libre).
Metáforas y Símiles
En el poemario abundan las metáforas que relacionan elementos naturales con cosas artificiales, propias del universo urbano.
Hacia el final de "Nocturno", por ejemplo, el poeta exclama: "¡Silencio! - grillo afónico que se nos mete en el oído - Cantar de las canillas mal cerradas!", construyendo una metáfora que relaciona las canillas -objeto inanimado- con el grillo -animal-, mencionando primero directamente "grillo afónico" en alusión al elemento artificial, y atribuyendo luego el "cantar" a las canillas. O sea: la metáfora representa las canillas como los grillos de la ciudad, mediante el sonido que ambos términos de la metáfora producen. Este recurso también aporta a construir una relación entre los elementos naturales y artificiales, una intención general ampliamente trabajada en el poemario.
El poema "Río de Janeiro" dice, en la segunda línea, que "Caravanas de montañas acampan en los alrededores", conformando una metáfora que configura las montañas como carpas, relacionando, nuevamente, estos elementos naturales con un objeto artificial.
"Apunte callejero" comienza diciendo que "El ruido de los automóviles destiñe las hojas de los árboles". Esta metáfora sirve al poeta para reforzar una de las intenciones de este poema, que es la de representar a la ciudad como un espacio un tanto nostálgico, de pérdida de lo natural en el ambiente urbano. El ruido, como tal, no es capaz de desteñir, pero el poeta elige esta personificación para construir la metáfora más amplia de que el bullicio de los transportes (como símbolo del desarrollo técnico) interfiere y aplaca la presencia de la naturaleza en la ciudad. "Destiñe" parece funcionar aquí como "interfiere con" o incluso "arruina".
El poema "Otro nocturno" comienza así: "La luna, como la esfera luminosa del reloj de un edificio público (...)". Esta construcción es un símil, que relaciona la luna con "la esfera luminosa del reloj de un edificio público". Ambos elementos son comparados, fundamentalmente, por su característica de ser luminosos, produciendo, una vez más, una comunicación entre un ente natural y uno artificial y urbano.
Aliteración y Asonancia
"Croquis sevillano" contiene un pasaje donde encontramos una aliteración del sonido [p]: "¡Plantas callicidas! Negras vestidas de papagayo, con sus crías en uno de los pliegues de la falda. Palmeras, que de noche se estiran para sacarle a las estrellas el polvo que se les ha entrado en la pupila". Los sustantivos principales de este párrafo comienzan con la letra "p": plantas, papagayo, pliegues, palmeras, polvo, pupila. La aliteración es un recurso que sirve para poner estas palabras en relación de forma poética, sin producir un sentido lineal, pero estableciendo una musicalidad que provoca un detenimiento en el sonido y el sentido. De esta forma, se va generando un encadenamiento entre los términos centrales del poema.
En el poema "Exvoto", el poeta abre la descripción de "las chicas de Flores" utilizando una aliteración: "Las chicas de Flores, se pasean tomadas de los brazos, para transmitirse sus estremecimientos". El sonido que se repite es el de la letra "s", y se produce la sensación de un movimiento suave, con cierta cadencia sensual, para describir el paso de las mujeres.
Irony
El poema "Lago Mayor" está atravesado por el procedimiento irónico.La ironía consiste en emitir un enunciado con la intención de que sea leído con un significado distinto del literal: se produce un efecto de distanciamiento con los términos utilizados, y con el significado "primero" de los mismos. El "nosotros" poético describe, en este poema, un lugar muy lujoso. En la apertura del poema, cuenta que encuentra el término "Humilitas" como presentación del espacio, porque figura en la puerta del lugar. La palabra "Humilitas" significa "humildad" en latín, y el poeta la transforma en leitmotiv al repetirla constantemente a lo largo del poema, intercalándola con las descripciones del lujo. Las contradicción entre el lujo descripto y el término repetido genera un efecto irónico.
Genero
Poesía; sobre todo, poemas en prosa, y algunos poemas en verso libre.
Ajuste
Diferentes ciudades del mundo, entre 1920 y 1922.
Tone
El tono utilizado en el poemario es, principalmente, coloquial e informal. Varios de ellos incluyen términos asociados a la sensualidad y a la sexualidad. Por momentos, hay humor.
Protagonista y Antagonista
N/A
Conflicto Principal
N/A
Climax
N/A
Presagio
"Apunte callejero" comienza con una línea que adjetiva a una familia como "gris". El color gris es normalmente asociado a un estado mediocre, tibio, apagado, aburrido. Muchas veces, también, lo encontramos asociado al ambiente de ciudad cuando es representado como algo agobiante, repetitivo y monótono. En este caso, el poema termina con una escena mortuoria, la del poeta construyendo la imagen del suicidio de su propia sombra. Además, construye otras imágenes que pueden leerse como consideraciones o sentimientos negativos en relación al entorno en que se encuentra: "alguien se crucifica", "miedo de estallar". En este contexto, la primera alusión al término "gris", así como las dos imágenes mencionadas, pueden leerse como un presagio o un anuncio de lo que viene después.
Atenuación
En "Croquis sevillano", Girondo escribe: "Un cura de Zurbarán, que vende a un anticuario una casulla robada en la sacristía". Este procedimiento lo vemos reiterado varias veces a lo largo del poemario: el poeta menciona situaciones que el lector puede entender como "reprochables", o moralmente dudosas, y están descritas sucintamente, sin detalle y sin juicio. Sucesos que podrían ser retratados como una denuncia, o por medio de una hipérbole para llamar la atención sobre su incorrección, aquí son mencionados casi con discreción, como desestimando su gravedad o relevancia.
Alusiones
"¡Cuando el sol incendia la ciudad, es obligatorio ponerse un alma de Nerón!". Esta frase de "Venecia" alude al mítico personaje de la tradición clásica, Nerón, trayendo junto a su mención las características que le son típicamente atribuidas: malicia, tiranía y poder. Esta alusión precisa, del lector, ciertos conocimientos sobre la historia romana, por lo que constituye una alusión a un universo cultural ajeno al poema, que trae consigo un conjunto de nuevos sentidos.
"Apunte callejero" contiene la siguiente imagen: "En un quinto piso, alguien se crucifica al abrir de par en par una ventana". Esta construcción alude a la escena mítica de la crucifixión de Cristo, aludiendo a un cuerpo en la altura, visto desde abajo, con el pecho y los brazos abiertos. En este contexto, la alusión religiosa opera en el sentido ya mencionado en otras secciones: Girondo juega con un procedimiento de desacralización, al acercar imágenes sacras al universo pagano, terrenal o citadino.
Metonimia y Sinecdoque
"Por ochenta centavos, / los fotógrafos venden / los cuerpos de las mujeres que se bañan". En estos versos, que cierran "Croquis en la arena", se construye una metonimia, porque se entiende que el poeta reemplaza "fotos" por "cuerpos", dos palabras que mantienen una relación de continuidad lógica: la foto contiene imágenes de los cuerpos. El procedimiento metonímico se sirve de esta relación de contigüidad entre los dos términos, posibilitando que se entienda uno por medio de la mención del otro.
En "Apunte callejero" podemos leer una sinécdoque: se mencionan los "senos" como reemplazo de "mujer". La sinécdoque consiste en hacer uso de la relación entre dos términos en la que uno contiene al otro, es decir, un término "menor" representa al "mayor" porque este lo contiene. En este poema, se lee: "Pasan unos senos bizcos buscando una sonrisa sobre la mesa". Se menciona únicamente la palabra "senos" (elemento particular del arquetipo de mujer) para referirse en verdad a una mujer. Este recurso es repetido varias veces en la obra de Girondo, y esta forma en particular (usar "senos" para referirse a "mujer") aparece en más de un poema.
Personificación
El recurso de la personificación (la atribución de acciones o adjetivos típicamente humanos a objetos o entes no humanos) es ampliamente utilizado en todo el poemario. Como se ha mencionado en la guía, se trata de un recurso ideal para la poética de Girondo, que consiste, en parte, en "equiparar" la existencia humana a la de un objeto o elemento natural. Por ejemplo: "Sobre las mesas, botellas decapitadas con corbatas blancas de payaso (...)". En esta línea, que abre el poema "Milonga", está conformada por una personificación: se utilizan términos propios del universo humano ("corbata", "decapitado") para describir un elemento no humano; en este caso, las botellas de champagne.
Hyperbole
En "Venecia", dice el yo lírico: "¡Cuando el sol incendia la ciudad (...)!" Aquí observamos una hipérbole, porque el poeta utiliza el verbo "incendiar", que consiste en prender fuego algo, de forma metafórica para expresar que el sol cae muy fuerte sobre la ciudad. Para expresar con énfasis la intensidad del calor que se siente, el yo poético se vale de este recurso poético.
Onomatopoeia
N/A