Sueño de una noche de verano Elementos Literarios

Teatro.

Inglés.

Atenas, época clásica.

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Cómico y dramático.

No hay ningún personaje que se destaque sobre los demás. La obra no tiene un protagonista claro ni tampoco un antagonista.

Diferentes personajes atraviesan una serie de dificultades en sus relaciones amorosas.

Sobre el final del tercer acto, todos los amantes están dormidos y han sido nuevamente hechizados para que vuelvan a amar a quienes les corresponde. Luego de este momento, con el comienzo del cuarto acto, empieza el desenlace de la obra.

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Hay diferentes alusiones a la mitología clásica: tanto Teseo como Hipólita son personajes de la mitología griega. En el comienzo del primer acto, Teseo se refiere a cómo la conquistó con su espada, aludiendo al mito de la conquista de las Amazonas. La historia de Píramo y Tisbe que los artesanos representan también proviene de la mitología griega.

Ver sección Imágenes.

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Se establece un paralelismo entre la obra que representan los artesanos y la trama central de la obra. En la historia de Píramo y Tisbe (representada por los artesanos), ambos se aman, pero no pueden estar juntos porque sus padres se lo prohíben. Dicha historia termina trágicamente con la muerte de ambos. En la trama de 'Sueño de una noche de verano', también hay personajes que se aman y no pueden estar juntos por la prohibición de los padres. Sin embargo, gracias a la intervención de la magia, esta historia tiene un final feliz.

"¿Cómo es que el odio, despojándose de toda amargura envidiosa, duerme al lado del odio, sin temer ningún acto de hostilidad"? (p.97).

Esta frase es pronunciada por Teseo cuando encuentra que Lisandro y Demetrio están durmiendo uno al lado del otro, sin ningún problema. No comprende cómo aquellos que se odian tanto pueden confiar y dormir en el mismo espacio. Para acentuar su incomprensión, en lugar de preguntarse cómo puede ser que Lisandro duerma cerca de Demetrio, personifica el odio. Entonces, el odio es el que duerme cerca del odio. Así genera un efecto poético en donde se resalta aun más lo extraño y contradictorio de la situación.

En el final de la obra, Puck le habla directamente a los espectadores, como si estos fueran parte de la obra. A este recurso dramático se lo denomina "romper la cuarta pared". Aquí, al romper la cuarta pared diciéndole al público que si no disfrutó de la obra puede pensar que lo que acaba de ver solamente fue un sueño, Puck pone en escena la intención del autor de dejar bien en claro que lo que sucede en una obra de teatro es una ficción, y no la verdad, y, como ficción, puede ser disfrutada o no, pero no puede ser censurada.