A pesar de que Elsa engaña a su marido Erdosain, es Barsut quien se llama "cornudo" a sí mismo
Gregorio se encuentra tan involucrado emocionalmente con Elsa que desconoce la presencia de Erdosain como marido y se llama a sí mismo "cornudo", expresión que se usa en Argentina para nombrar al engañado o engañada en una relación amorosa. Al contarle el suceso a Gregorio, Erdosain espera recibir la peor de las humillaciones, pero se sorprende cuando, irónicamente, es Barsut quien manifiesta sentirse humillado como marido.
Según Haffner, la explotación es, irónicamente, peor en las fábricas que en los prostíbulos, a pesar de lo que indicaría la indignación de Erdosain y el resto de la sociedad
Ante la indignación de Erdosain en relación a los prostíbulos, el Rufián Melancólico le responde:
Lo que usted dice no tiene sentido. La sociedad actual se basa en la explotación del hombre, de la mujer y del niño. Vaya, si quiere tener conciencia de lo que es la explotación capitalista, a las fundiciones de hierro de Avellaneda, a los frigoríficos y a las fábricas de vidrio, manufactura de fósforos y de tabaco. —Reía desagradablemente al decir estas cosas—. Nosotros, los hombres del ambiente, tenemos a una o dos mujeres; ellos, los industriales, a una multitud de seres humanos. ¿Cómo hay que llamarles a esos hombres? ¿Y quién es más desalmado, el dueño de un prostíbulo, o la sociedad de accionistas de una empresa? Y sin ir más lejos, ¿no le exigían a usted que fuera honrado con un sueldo de cien pesos y llevando diez mil en la cartera? (p.43).
Luego de esta reflexión, al lado de los dueños de las fábricas, los proxenetas se asemejan a meros señores de negocios.