Altavoz o Narrador, y Punto de Vista
Dante.
Forma y Medidor
Terceto encadenado.
Metáforas y Símiles
"A mitad del camino de la vida"
(Canto I, v. 1)
En el primer verso del poema, encontramos una metáfora, ampliamente extendida, que compara a la vida con un viaje. Este verso también nos aporta información sobre la edad del protagonista. Siguiendo la tradición bíblica, la mitad de la vida se ubica en los treinta y cinco años.
Aliteración y Asonancia
"y caí como un cuerpo muerto cae"
(Canto V, v. 142)
Esta aliteración (figura retórica que consiste en la repetición de un sonido), en el verso final del Canto V, pone énfasis en la caída del protagonista. El desmayo de Dante, después de escuchar el drama sentimental que relata Francesca, sugiere que el protagonista siente una fuerte empatía por ella, y acaso se siente identificado con las circunstancias que la llevaron a pecar (justo en el momento en que leía un pasaje de una obra exponente de la literatura de amor cortés).
Irony
"¡Goza, Florencia, ya que eres tan grande,
que por mar y por tierra bate alas,
y en el infierno se expande tu nombre!"
(Canto XXVI, vv. 1-3)
Dante lanza una diatriba contra Florencia, exaltando su grandeza y su fama en el Infierno. El elogio resulta irónico, puesto que no realza el prestigio de esta ciudad, sino su demérito, por el lugar en el que ha adquirido renombre.
Genero
Poema narrativo, relato de viaje.
Ajuste
Semana Santa de 1300.
Tone
El tono general es dramático, pero tiene momentos cómicos.
Protagonista y Antagonista
El protagonista es Dante. Funciona como antagonista el mal o el pecado.
Conflicto Principal
El protagonista se encuentra en una situación inicial de desvío moral y desea alcanzar una vida virtuosa, a fin de salvar su alma.
Climax
En el último canto del 'Infierno', Dante observa al mayor pecador, Lucifer, quien se encuentra confinado en el fondo del abismo por haber traicionado a Dios.
Presagio
"(...) pues esta bestia, que gritar te hace,
no deja a nadie andar por su camino,
mas tanto se lo impide que los mata;
y es su instinto tan cruel y tan malvado,
que nunca sacia su ansia codiciosa
y después de comer más hambre aún tiene.
Con muchos animales se amanceba,
y serán muchos más hasta que venga
el Lebrel que la hará morir con duelo."
(Canto I, vv. 94-102)
Este es el primer presagio que encontramos en el poema. Virgilio anuncia que alguien pondrá fin a la codicia que amenaza el bienestar de la sociedad (el Lebrel hará morir con duelo a loba, símbolo de la codicia). La identidad del Lebrel no está definida, aunque algunos intérpretes han sugerido que alude al emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Enrique VII. En líneas generales, su figura remite a un reformador político o religioso, enviado providencialmente, que pondrá fin al principal vicio que debilita el orden social.
Atenuación
"sus caras que no eran nada buenas"
(Canto XXI, v. 99)
Dante siente un gran temor al observar a los demonios que, en uno de los valles del octavo círculo infernal, hieren ferozmente con sus garfios a los condenados. Con esta atenuación o lítote se refiere a la maldad que observa en los rostros, negando su contrario.
Alusiones
"Poeta fui, y canté de aquel justo
hijo de Anquises que vino de Troya
cuando Ilión la soberbia fue abrasada"
(Canto I, vv. 73-74)
Virgilio alude en este pasaje al protagonista de su poema épico, la 'Eneida'. Allí se narra la historia de Eneas, el hijo de Anquises, quien huyó de Troya después de la destrucción de esta ciudad. Después de oír estas palabras, Dante reconoce inmediatamente a Virgilio, quien, como afirma más adelante, es su maestro y su modelo en poesía.
Metonimia y Sinecdoque
"(...) Por otra vía y otros puertos
a la playa has de ir, no por aquí;
más leve leño tendrá que llevarte"
(Canto III, vv. 90-93)
Caronte le explica a Dante que no puede llevarlo en su barca, puesto que el peregrino es un alma aún con vida. Caronte se refiere a su embarcación con la metonimia "leño".
Más tarde, Dante utiliza la misma metonimia para referirse a la embarcación de Flegias: "Cuando estuvimos ambos en el leño / hendiendo se marchó la antigua proa" (Canto VIII, vv. 28-29).
Personificación
N / A
Hyperbole
"Aquí con más de mil me encuentro"
(Canto X, v. 118)
Farinata se refiere con estas palabras a las almas que se hallan en el mismo círculo infernal que él, el sexto. La hipérbole enfatiza la cantidad de herejes condenados en el Infierno.
Onomatopoeia
"En verdad que me hallaba justo al borde
del valle del abismo doloroso,
que atronaba con ayes infinitos."
(Canto IV, vv. 7-9)
Dante se encuentra en el borde del primer círculo del Infierno, desde donde puede oír las voces acongojadas de quienes cumplen su condena. "Ayes", el plural de "ay", remite al sonido de los lamentos de los condenados.