María del Carmen Huerta
Sus apodos son Mona y Siempreviva. En cierto momento se refiere a sí misma como "Reina del Guagancó". Es la narradora y protagonista del relato: escribe su propia historia. La parte de su vida que relata comienza, aproximadamente, a sus dieciséis o diecisiete años. Físicamente, es una muchacha rubia y atractiva, cuya piel es tan blanca que hace que resalten sus venas azules.
Es una adolescente rica del norte de Cali que asiste a una de las mejores escuelas de la ciudad, el Liceo Benalcázar, y es muy aplicada en sus estudios, al punto de lograr el segundo puesto en el examen de admisión de la carrera de Arquitectura en la Universidad del Valle. Su padre es un prestigioso fotógrafo, quien la asiste con dinero periódicamente, incluso cuando deja la casa familiar. La vida de la protagonista cambia completamente cuando conoce los placeres nocturnos relacionados con la música, el baile y las drogas. Su primer encuentro con la música se establece con el rock en inglés; su segundo encuentro, verdaderamente transformador, lo produce la salsa y el guagancó.
Al final de la obra, afirma que es prostituta y vive sola en un pequeño cuarto alquilado, vestida con ropa raída y oscura. Sigue recibiendo el dinero de los padres, ahora con mayor asiduidad, y destina su vida a su único placer: salir de rumba salsera.
La madre de María del Carmen Huerta
Es una mujer con muy buen pasar económico que vive junto a su familia en el barrio de Versalles, en el norte de Cali. Fanática de la música de Jeanette MacDonald y Nelson Eddy.
El padre de María del Carmen Huerta
Fotógrafo reconocido de Cali y aficionado a la cinematografía que vive, junto con su familia, conformada por Mona y su esposa, en el barrio de Versalles.
Armando el Grillo
Compañero de estudios de María del Carmen. Es uno de los marxistas del grupo de lectura de El capital. Le dicen "el Grillo" por sus ojos, parecidos a los de un sapo. Se siente atraído por su amiga.
Antonio Manríquez
Compañero de estudios de María del Carmen. Es uno de los marxistas del grupo de lectura de El capital.
Lucía
Amiga de la escuela de María del Carmen. Es la única con la que la protagonista lamenta haber perdido contacto. En un momento piensa en llamarla para recuperar el vínculo, pero rápidamente se arrepiente y corta la llamada antes de que atienda.
Sirvientas
Empleadas del servicio doméstico de la casa materna de María del Carmen. Son tres. No tienen mucha participación en la historia: asisten a la joven, le preparan las comidas solicitadas, dan aviso de las llamadas. No se las individualiza.
Ricardito el Miserable Sevilla
Amigo de María del Carmen. Ella le dice "el Miserable" porque sostiene que él es una persona que sufre mucho. Ricardito es hijo único y es un pésimo alumno en la escuela. Su madre, una bonita y escultural mujer que gusta vestir con cuero y brillos, alarmada ante sus notas, le muestra diapositivas de viajes y museos para intentar formarlo. Sin éxito, deja de prestarle atención y decide ignorarlo, motivo por el que el joven se queja y sufre. Desde ese momento, Ricardito se despierta temprano, desayuna solo, almuerza afuera con Coca-Cola y pan y vuelve a su casa de noche. No conduce porque en su casa no le prestan el automóvil: lo chocó en reiteradas oportunidades debido a sus inseguridades.
Es adicto a la cocaína, la que incluso le es suministrada por su madre, que se la trae como obsequio tras sus viajes por Estados Unidos con la excusa de calmar sus traumas, aunque él supone que lo hace para terminar internándolo en un psiquiátrico.
Ricardito sabe inglés y le traduce las canciones a su amiga. Termina, como sospecha inicialmente, internado, pero en lugar de llevarlo a Inglaterra para tal fin, su familia lo aloja en el Hospital psiquiátrico "San Isidro", de Cali.
Mariángela
Muchacha de 17 años, habitante del norte de Cali a la que la protagonista admira. De ojos hundidos y mirada filosa, es la primera del barrio que toma esa vida de la noche. La narradora describe que responde al ritmo de la música con movimientos que implican fuerza en el vientre y furia. Todos la admiran y, a la vez, le temen.
Hija de madre soltera, la atormenta pensar que a su edad ya ha vivido más que su madre a los 50 años. Su padre, un campeón de tenis belga, enamora a su madre en un tour y luego nunca más la vuelve a ver.
Su madre muere de sobredosis de Valium10 y, poco tiempo después, sumida en la depresión, Mariángela se suicida arrojándose desde el piso 13 del edificio de la compañía telefónica Telecom. En el momento en el que Mona escribe su historia, Mariángela ya está muerta.
Silvio
Amigo desde la infancia de la protagonista. Sincero e interesado en ella, es quien le suministra discos de música en inglés para que Mona aprenda. Solamente es nombrado en una oportunidad.
Bull y Tico
Dos jóvenes amigos inseparables del norte de Cali. Suelen escuchar música con un transistor pequeño pero de poderoso volumen que se pasan de oreja a oreja. Les gusta salir de rumba por las noches.
Mona cuenta que durante el verano del 66 tiene una cercanía con Bull, pero que desde que comienza a juntarse con Tico no lo vuelve a ver con mujeres. A Tico, en cambio, sí.
Pedro Miguel Fernández
Joven estudiante del barrio del norte de Cali que asiste a una fiesta con Mona y sus amigos. Con el paso del tiempo envenenaría a sus tres hermanas. No tiene mayor participación en la novela.
Carlos Phileas
Joven estudiante del barrio del norte de Cali que asiste a una fiesta con Mona y sus amigos. Lector de H.G. Wells. No tiene mayor participación en la novela.
Lucio del Balón
Joven estudiante del barrio del norte de Cali que asiste a una fiesta con Mona y sus amigos. Mona confía en que llegará a ser un médico famoso en algún momento de su vida.
Leopoldo Brooke
Muchacho estadounidense, guitarrista mediocre, amante de la música rock, consumidor frecuente de cocaína. De elevada estatura y cabello pelirrojo, habita un departamento en el barrio de Versalles. Su familia lo envía a Colombia para que se ocupe de algunos negocios de la empresa familiar. Detesta a los colombianos y se vincula, sobre todo, con otros estadounidenses que viven o pasean en Colombia. Añora regresar a San Francisco, Estados Unidos.
Es el primer amante de Mona. Ella lo abandona cuando descubre la salsa.
Flaco Flores
Dueño de la gran casa donde se realiza la primera fiesta que narra Mona. Es quien le da ácido por primera vez a la protagonista.
En una habitación del piso superior de su casa se encuentran tres cadáveres: son los de los padres y la niñera del Flaco Flores. Jamás se conoce la verdad de los hechos, pero se cuenta que el criminal es él. Tras ello, el Flaco es internado en el Hospital psiquiátrico San Isidro, donde es sometido a choques eléctricos, consumo de drogas varias y hambre. Cuando sale del hospital apenas puede caminar. Una prima lo lleva a Dallas, Texas, donde vive rodeado de gatos cantando incoherencias.
Roberto Ross
Un muchacho de trece años, con la piel llena de acné adolescente, conocido como el chutero más joven de Colombia. Se denomina a sí mismo como el profeta del mal ejemplo y se cataloga como víctima y no victimario. Visita la casa de Leopoldo Brook para proveerle droga.
Se cuenta parte de su corta historia: el joven prueba la droga durante su estadía de un año en Estados Unidos, producto de una beca con el American Field Service, y, al regresar a Cali, se populariza y es rechazado por su conocimiento sobre ácidos. Lo culpan, aunque no pueden acusarlo, de la locura y posterior muerte de una chica de doce años que era su novia, llamada Margarita Bilbao. Como la cocaína lo deprime, comienza a inyectársela. Su prestigio en el mundo de las drogas aumenta con la llegada de estadounidenses drogadictos y delincuentes.
Gringos
Son los dos acompañantes de Robertico Ross: asisten a drogarse a la casa de Leopoldo Brook.
Teresa la Piraña
Una de las bailarinas de la fiesta en la montaña: la primera bembé a la que acude Mona.
José Hidalgo
Estudiante universitario y deportista. Es una de las parejas de baile de Mona en la fiesta en la montaña, en casa de Teresa la Piraña, y uno de los voleibolistas con los que ella tiene sexo y convive una semana.
Marcos Pérez
Estudiante universitario y deportista. Es una de las parejas de baile de Mona, el de los boleros, en la fiesta en la montaña, en casa de Teresa la Piraña, y uno de los voleibolistas con los que ella tiene sexo y convive una semana. Es un hombre parecido a López Tarso, un actor mexicano, con un rostro que Mona califica como "cara de tragedia escondida".
Manuelito Rodríguez
Estudiante universitario y deportista. Es una de las parejas de baile de Mona en la fiesta en la montaña, en casa de Teresa la Piraña, y uno de los voleibolistas con los que ella tiene sexo y convive una semana. Huele a tinta porque se dedica a fabricarla. Tiene una empaquetadora clandestina y etiquetas INK.
Manuela
Anfitriona de la fiesta que se realiza en la montaña. Desde que conoce a Mona, la admira. Nunca vuelven a cruzarse personalmente, pero, por sus cartas, Mona se entera de que esta mujer la idolatra, le copia sus vestidos y está eternamente agradecida por su presencia en aquella fiesta.
Amanda Pinzón
Prima de la protagonista. Vive en el barrio del norte de la ciudad. Organiza una fiesta a la que Mona acude y de la cual es echada por su actuar escandaloso.
Rubén Paces
Joven amante de la salsa que Mona conoce al salir del cine. Mantiene una relación con ella durante algún tiempo. Físicamente, la protagonista lo describe de la misma estatura que ella, cejón y dientón, con cara bonita y piernas largas. Vive contra el muro del Instituto de Ciegos y Sordomudos, en un garaje pequeño en el barrio de San Fercho. Se dedica a la administración y programación de discoteca de fiestas: Ritmos Transatlántico. Es discómano: tiene una colección inmensa de discos y cassettes de músicos como Richie Ray, Bobby Cruz, Miki Vimari, Mike Collazos, Russel Farnsworth y Pancho Cristal, muchos de los cuales los consigue dado su raterismo en las fiestas. Su jefe es Don Rufián.
Rubén vive arrepentido por el consumo excesivo de drogas durante la noche en la que asiste al show de Richie Ray: no recuerda nada del asunto y eso lo atormenta y le provoca vómitos en cada rumba. Termina matándose por no poder soportar su vida.
Don Rufián
Jefe de Rubén Paces. Viejo cojo y de mal carácter al que no le gusta la música, pero que vive gracias a ella. Para que le teman, hace correr rumores de supuestas conexiones con la mafia.
Flaco Tuercas
Amigo de la infancia y la adolescencia de Rubén Paces. Es el que le hace probar la marihuana y con quien asiste al concierto de Richie Ray y Bobby Cruz.
Salvador
Amigo universitario del Flaco Tuercas. Es quien lo introduce en el consumo de barbitúricos a Rubén Paces la noche del concierto de Richie Ray y Bobby Cruz.
Bárbaro
Joven de diecisiete años que vive en un taller de artesanías que le presta el primo en el extremo sur, en la última llanura antes de la montaña. Lo sigue un grupo de niños que siempre está a su alrededor. Se dedica al robo y asesinato de gringos que, desprevenidos, salen a buscar hongos alucinógenos.
Es el último amante de la protagonista. Se quita la vida luego de matar con su navaja a uno de los extranjeros a los que ataca.
Dino
Uno de los gringos que recolecta hongos en la montaña, víctima de Bárbaro.
María Iata Bayo
Joven puertorriqueña que vive en Miami y está de viaje por Colombia con su pareja estadounidense. Habla perfecto español y sufre el ataque de Bárbaro y Mona en la montaña, mientras recolecta hongos. Tiene una conexión inmediata con la protagonista, mantiene sexo con ella y pasan una noche juntas antes de emprender su viaje de regreso a Estados Unidos.
Pareja de María Iata Bayo
Un hombre gordo, peludo y bien vestido, estadounidense, que está en pareja con María Iata. Es atacado por Bárbaro en la montaña: es su última víctima, muere allí.
