La gaviota Elementos Literarios

Dramático. A pesar del final trágico, Chéjov refiere a su obra como a una "comedia".

Ruso.

Finca en la campiña rusa, a fines del siglo XIX.

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Tono melancólico, con tintes de comedia.

Tréplev es el protagonista y considera a Trigorin su antagonista.

El conflicto principal de la obra es de carácter amoroso y, al mismo tiempo, de competencia en términos artísticos. Tréplev, un joven con aspiraciones de dramaturgo o escritor, se enfrenta a la progresiva pérdida de cariño de la mujer a la que ama, Nina, una muchacha campesina con aspiraciones de actriz que se enamora de Trigorin, un célebre escritor que está de visita en la casa por ser la pareja de Arkádina, madre del protagonista.

El clímax de la obra se da en el último acto, cuando tiene lugar el último encuentro entre Nina y Tréplev: la muchacha confiesa que, a pesar de haber sido destruida por Trigorin, sigue enamorada de él y, cuando esta parte definitivamente, el joven protagonista se suicida.

El indicio o presagio más significativo se da en boca de Trigorin en el segundo acto. Cuando ve la gaviota que ha asesinado Tréplev, se le ocurre un argumento para un relato acerca de una muchacha que vive a orillas del lago y que es libre y feliz como una gaviota, hasta que un hombre llega y la destruye. De algún modo, en el último acto se devela cómo Nina es aquella gaviota cuya felicidad se vio opacada a manos de Trigorin.

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En el primer acto de la pieza se dan numerosas alusiones a 'Hamlet' de Shakespeare, cuyos parlamentos son citados por Arkádina y por Tréplev. Además, se alude a autores rusos como Tolstoy o Turgueniév, y se cita un fragmento de un texto de Maupassant.

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Una situación paradójica que se presenta varias veces a lo largo de la obra es la de la relación entre Sorin y Shamrayev: aunque este último es empleado por el primero, es quien grita y, lejos de obedecer a lo que le piden, da órdenes y se ofende cuando lo cuestionan.

Se da en la obra una suerte de paralelismo entre los destinos de Polina y de Masha, su hija: en ambos casos, las mujeres aman a hombres que no las corresponden y acaban casándose con hombres a los que no aman.

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En pocas ocasiones, en la obra algunos personajes realizan "apartes", es decir, hacen uso de un recurso dramático que permite al público oír un parlamento que los demás personajes, en teoría, no están oyendo. Se crea, mediante este recurso, una complicidad entre el personaje y el público que suele tender a fines cómicos.