Narradora
Es una de las tres niñas protagonistas de la historia; se desconoce su nombre y su parentesco exacto con Leticia y Holanda, aunque el lector puede sospechar que son sus hermanas o primas, puesto que convive con ellas, con su madre y con la tía Ruth.
La narradora se debate constantemente entre los celos y la compasión por Leticia, ya que se siente apenada por los problemas de salud que padece, pero, a su vez, se ve afectada por el trato deferencial que todas en la casa le otorgan. Estos sentimientos contradictorios de la narradora florecen cuando, en una de las tardes de juego, Leticia capta la atención de Ariel, un chico que declara que ella es la más bonita de las tres.
Holanda
Se trata de una de las niñas protagonistas del cuento. Holanda pasa las tardes jugando en las vías con Leticia y la narradora; con esta última posee un fuerte vínculo, ya que juntas ayudan con las tareas de la casa, mientras que Leticia suele encerrarse a leer en su pieza. Cuando Ariel se introduce en sus vidas y se enamora de Leticia, Holanda padece la mezcla de celos y alegría que también asalta a la narradora. Sin embargo, Holanda ayuda a Leticia y se convierte en la intermediaria entre ella y Ariel.
Leticia
Se trata de una de las tres protagonistas del relato. Leticia padece un problema de salud que le paraliza una parte del cuerpo. La niña pasa su tiempo leyendo, jugando con la narradora y Holanda en las vías tren y realizando tratamientos para aliviar sus dolencias. Cuando capta la atención de Ariel durante las tardes de juego en las vías, Leticia experimenta una gran felicidad. Lamentablemente, cuando Ariel expresa su deseo de conocerla en persona, Leticia comprende que el joven la rechazará por su enfermedad y decide no encontrarse con él. Este desencuentro precipita el final definitivo de los juegos de las tres niñas.
La madre
Poco se sabe de este personaje, salvo que es la madre de la narradora y madre o tía de Holanda y de Leticia. Junto a la tía Ruth, la madre se ocupa de los quehaceres de la casa y del cuidado de las niñas, quienes suelen lograr que se enfade debido a todas las travesuras que hacen.
La tía Ruth
Se trata de la tía de la narradora y de la madre o la tía de Holanda y Leticia. Junto a la madre de la narradora, Ruth se encarga de criar a las niñas, de mantener en orden la casa y de cuidar de la salud de Leticia.
Ariel B.
Es un joven que viaja en el ferrocarril para ir y volver de la escuela. Todas las tardes se sienta al lado de la misma ventanilla y observa a las tres niñas realizar sus poses. Un día decide arrojarles un papel para felicitarlas por su trabajo y, a partir de ese momento, entabla con las niñas una comunicación que se mantiene a través de miradas, saludos y papelitos que él arroja desde el tren.
Con el tiempo, Ariel expresa que se siente particularmente atraído por Leticia y desea conocerla en persona. Sin embargo, cuando visita a las niñas, Leticia no lo recibe y, en su lugar, le hace llegar una carta. Al día siguiente, Ariel observa a Leticia por última vez, y luego las niñas no lo vuelven a ver en la ventanilla del tren que suele ocupar.
