Bodas de sangre

Bodas de sangre Resumen y Análisis Acto I, Cuadro II

Resumen

Acto I, Cuadro II, Escena I

Comienza en otra sala, en otro hogar, con la Suegra (madre de la Mujer de Leonardo) y su hija (Mujer de Leonardo). La Mujer es la prima de la Novia, y Leonardo es miembro de la familia de los Félix, la familia enemiga de la Madre. Ellos están casados y tienen un bebé. Es la primera vez que aparece el diálogo en forma de verso, porque las mujeres están cantando una nana al niño. La canción gira en torno a un caballo.

Acto I, Cuadro II, Escena II

Llega Leonardo y comenta que las herraduras de su caballo se rompen con frecuencia. Agrega que no lo utiliza mucho, pero la Mujer dice que las vecinas lo han visto lejos de allí con su animal. La Suegra vuelve a espetar que ve al caballo muy cansado, y la Mujer excusa a Leonardo. Entonces le cuenta que su prima se va a casar. La Suegra menciona la relación que Leonardo tuvo con ella años atrás, y la Mujer llora. Leonardo le grita "¿Vas a llorar ahora? ¡Quita!".

Acto I, Cuadro II, Escena III

Aparece la Muchacha. Le cuenta a la Suegra que el Novio y su Madre han ido a la tienda de la que, aparentemente, ellas son dueñas. Le comenta que eligieron buenas cosas, y muy caras.

Acto I, Cuadro II, Escena IV

Vuelven a la escena Leonardo y su Mujer. Leonardo maltrata también a la Muchacha: cuando ella explica lo que había venido a decir, él le responde "No nos importa". La Suegra la defiende, y Leonardo le dice: "No le he preguntado su opinión". Luego se levanta para volver a irse, la Mujer le pregunta dónde va y él la manda a callar. La Suegra también calla a su hija, Leonardo sale y la Suegra busca al niño.

Acto I, Cuadro II, Escena V

Mujer y Suegra vuelven a cantar la misma nana, con el niño en brazos. Lloran ambas.

Análisis

En la nana que cantan la Suegra y la Mujer aparecen varias menciones al caballo. Este animal es, tradicionalmente, un símbolo de la hombría, y en la canción aparece de diversas formas, pero siempre con un tinte negativo: “caballo grande / que no quiso el agua”, “el caballo no quiere beber”, “el caballo se pone a llorar”. Esto puede tener múltiples interpretaciones pero, en todo caso, se trata de construcciones negativas en relación a la masculinidad: pueden estar dirigidas, simultáneamente, a Leonardo (que anda siempre junto a su caballo, porque huye) y al niño (porque hereda la condición trágica de ser hombre). Esta imagen funciona, al mismo tiempo, como un nuevo presagio, dado que construye la idea de que algo negativo acontecerá en el destino de el o los hombres.

En este cuadro también podemos ver cómo la Suegra se comporta en relación a su hija y Leonardo: si bien intenta posicionarse contra el maltrato de Leonardo, termina por replicar esta violencia hacia su propia hija. En esta actitud, la Suegra también exhibe su funcionamiento como personaje que mantiene el status quo: intenta colaborar para que su hija, pese a su incomodidad, se mantenga en el rol que le toca, de esposa y madre, sin enfrentar a su marido.

En este cuadro también observamos la primera incursión de la forma lírica (en verso) en el diálogo. Sobre este uso nos hemos explayado en la sección "Otros", pero podemos remarcar el hecho de que aquí se incluye, en el canto de la Mujer y la Suegra, una nana que pertenece a la cultura popular de la sociedad representada en la obra. Esta nana, como otros cantos que Lorca incluye en la pieza, pertenecen al arte popular, que sería visto como "bajo" para ciertos sectores "culturalmente elevados" de la sociedad española de la época: cantos simples, que se transmiten de boca en boca, de familia en familia. Esto nos ubica en la idiosincracia a la que pertenece la familia de Leonardo. Además, establece también una tradición, un linaje: hay un elemento cultural que vemos, precisamente, ser comunicado de madre a hija, como es la letra de esta canción. Esto también refuerza, poéticamente, la idea del destino y la herencia, como cosas que se transmiten los familiares del mismo género.

Por otro lado, podemos interpretar que el enojo de Leonardo con la Muchacha que viene de la tienda puede explicarse por una información que tenemos más adelante en la obra: Leonardo considera que la Novia no quiso casarse con él porque no tenía el suficiente dinero (esto lo expresa él cuando discuten en las horas previas a la boda). Como la Muchacha cuenta, frente a la Mujer y la Suegra, que la familia del Novio tiene mucho dinero, podemos interpretar que Leonardo toma esto como una ofensa a su propia virilidad, en tanto hombre proveedor.

Otra cuestión importante que subyace a esta escena, y contribuye a crear la tensión generada por una cierta violencia contenida, es el hecho de que Leonardo parece estar ocultando algo. La Mujer indaga: cuando Leonardo se queja por las herraduras de su caballo, le dice "¿Y no será que lo usas mucho?". Ante la negativa de Leonardo, le dice que le comentaron que lo vieron muy lejos de allí con su caballo. Él vuelve a negarlo, pero ella comenta que su madre le dijo después que el caballo estaba, efectivamente, muy cansado. A esto se suma la respuesta, ya agresiva, que Leonardo ofrece después, cuando ella le pregunta a dónde parte. Por estos intercambios, podemos pensar en que este personaje oculta algo. Incluso se nos permite entrever que tanto la Suegra como la Mujer sospechan que Leonardo es infiel o tiene una relación clandestina, y es por eso que preguntan e indagan, pero, al encontrarse con respuestas tajantes o agresivas, dejan de hacerlo.

Esto se relaciona también con lo que hemos mencionado en el análisis del Cuadro I respecto de la circulación de información en este ámbito social: el chisme, el comentario sobre las vidas y modos de actuar de los demás, son muy importantes para sostener el status quo: sobre todo, para poner en evidencia a aquellos que se salen de esa norma, como hacen las muchachas que le comentan a la Mujer que han visto a Leonardo lejos de su casa. Aquí se introduce el tema, clave en la pieza, de la traición y la infidelidad. El amorío entre Leonardo y la Novia aparece, hasta bastante avanzada la obra, como algo sospechado pero oculto, secreto, no dicho. Es también lo que debe callarse para que las instituciones sociales aceptadas (el matrimonio) puedan consumarse.

En definitiva, en este cuadro observamos de manera bastante contundente roles sociales como los de la Mujer y la Suegra, que buscan contener la violencia del hombre y 'traerlo' al interior del hogar, pero la actitud agresiva de él termina por amedrentarlas. La Mujer, entonces, calla y cuida a su hijo, mientras que su propia madre (la Suegra) la acompaña y ayuda con el cuidado. El hombre -Leonardo-, por otro lado, parece ir y venir como le place. De esta forma, aparecen representados tres roles de un núcleo familiar tradicional dentro de la sociedad que se muestra en esta pieza. Los temas del género y la hombría, que desarrollamos en la sección "Temas" están fuertemente presentes en todo este intercambio.