La novela ofrece un examen de la sociedad mexicana de finales del siglo XVIII y principios del XIX. A través de su personaje central, la novela ofrece una exploración de los diferentes niveles de pobreza y privilegio en México, así como de las consecuencias de esas estratificaciones sociales.
Es una novela picaresca que sigue la vida del personaje titular, Periquillo Sarniento. Está dividida en tres partes, cada una de las cuales narra un periodo diferente de la vida del protagonista. En la primera parte, Periquillo, joven de origen humilde, es acogido por una familia adinerada y vive una época de lujo. En la segunda parte, Periquillo es un joven adulto que experimenta diversas desgracias, incluida una temporada en la cárcel. A medida que avanza en su vida, participa en algunas escapadas, como unirse a un grupo de bandoleros y trabajar como criado. Se encuentra con una serie de personajes, como amigos, familiares, villanos y otras personas que le ayudan a lo largo de su viaje. A lo largo de sus aventuras, aprende importantes lecciones sobre la honradez y la perseverancia, que le ayudan a alcanzar su sueño. Finalmente, en la tercera parte, Periquillo ya es un anciano y puede reflexionar sobre su vida y las experiencias que ha vivido.
A lo largo de la novela, Fernández de Lizardi examina las estratificaciones sociales de la sociedad mexicana y el impacto que tienen en los individuos. A lo largo de la novela, Periquillo se enfrenta a decisiones difíciles que le obligan a enfrentarse a la realidad de la pobreza y la desigualdad. También se ve obligado a enfrentarse a las consecuencias de sus propias decisiones. Además, el autor utiliza el personaje de Periquillo para criticar al gobierno corrupto y opresor de la época.